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El arte de escuchar



En el mundo del Feldenkrais, que tiene sus raíces en el hebreo y en el inglés, se usa mucho el verbo “escuchar” para referirse a poner atención al movimiento y a las sensaciones corporales. “Escucha cómo esta apoyada tu pelvis en el piso”; “escucha el movimiento de tu esternón al respirar”...


Escuchar se refiere a poner atención a lo que oímos, tal como mirar hace referencia a la atención a lo que vemos. Para el sentido propioceptivo no existe un verbo semejante, así que tenemos que recurrir a un término prestado de otro sentido.


Me parece particularmente pertinente usar esta palabra en el mundo de los músicos. Sabemos que se puede desarrollar, mejorar y refinar la escucha. El entrenamiento del oído que recibimos nos enseñó a percibir varias voces a la vez, reconocer intervalos y armonías, leer partituras, mejorar la sensibilidad a la afinación, al timbre y a muchos otros detalles musicales que el oído no entrenado no percibe. Lo mismo vale para el sentido propioceptivo: se puede entrenar y mejorar. Y esta mejora nos sirve mucho a los músicos para la práctica cotidiana y la ejecución: aprendemos a reconocer tensiones innecesarias, incluso las más mínimas; desarrollamos la capacidad de dividir la atención, de estar pendientes de la ejecución musical y al mismo tiempo de la respiración, del omóplato izquierdo y de la planta del pie derecho. El músico profesional necesita agudizar esas sensaciones de su cuerpo del mismo modo que necesita la audición híper-desarrollada.


En mis años de trabajo como pianista acompañante he sido testigo de una auto-conciencia corporal deficiente en muchos músicos. Su concepto de técnica enfoca la atención en algunas partes del cuerpo y deja de lado otras. Podría generalizar y constatar que el enfoque está en la motricidad fina y se pone muy poca atención a la motricidad gruesa: cómo me mantengo erguido, cómo me relaciono con la fuerza de gravedad, cómo uso la fuerza de los músculos grandes del tronco, la pelvis, la espalda.


Mi tarea como profesional del Método Feldenkrais para músicos se radica en despertar y mejorar este foco esencial de atención. En muchos casos parece necesario recordarle al músico que tiene cuerpo, a pesar de que pasa horas por día enfocado en algunos movimientos, en algunos detalles de la acción física.


Si te interesa ampliar el enfoque de lo que haces para aprender más y mejorar, mira mi página web: https://www.michael-landau.cl/



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