Mi trabajo con músicos, basado en el Método Feldenkrais® aborda a la persona en su totalidad: cuerpo, mente y alma. No se trata del movimiento como un asunto aislado. ¿Por qué, entonces, tanto énfasis en el movimiento?
Moshé Feldenkrais era científico; sus campos eran la física nuclear y la ingeniería. La mente y las emociones le parecían muy vagas e imprecisas para explorar y para registrar cambios. El movimiento permite una indagación de los detalles, permite registrar, darse cuenta, controlar y comprobar pequeñas diferencias; además, utilizamos el sentido propioceptivo (la información que proporciona el sistema nervioso acerca de la posición de las partes del cuerpo y el tono muscular) que contribuye con información clara y precisa acerca de lo que está sucediendo realmente. Esto convierte al campo del movimiento en una fuente de información que registra cambio, y por lo tanto, nos permite cambiar. En otras palabras, permite el aprendizaje. Feldenkrais les dio a sus clases grupales el nombre “Autoconciencia a través del movimiento (ATM)®”.
En movimiento podemos explorar nuestros patrones habituales, podemos dirigir la atención a distintos aspectos de ellos y proponernos variaciones posibles. Y dado que somos una unidad inseparable, cualquier cambio en el movimiento conlleva un cambio global, en las emociones, en la comunicación con otros, en los temores, la seguridad, la emanación energética y el espacio que ocupamos en el mundo.
Si participaste en el desafío para músicos “Mejorar, no solo estudiar”, pudiste ver que se puede generar cambios de distintas maneras, a través de poner atención: cambiar el ritmo, cambiar el foco de atención, hacer algo distinto de lo habitual, o simplemente descansar. Se puede “hacer Feldenkrais” en cualquier actividad o parte de la vida, porque Feldenkrais no es una serie particular de ejercicios, sino más bien una mirada, una manera de afrontar cualquier cosa que hacemos, sentimos o deseamos.
El movimiento nos sirve como un laboratorio de investigación. Y las clases de movimiento del Método son muy ingeniosas en generar todas esas condiciones que favorecen el aprendizaje: sorpresa, cosas no habituales, desafíos al cerebro, variación. Cada clase es distinta, no se repite movimientos mecánicamente sino que se encuentra siempre un nuevo ángulo para observar. Dirigimos la atención a aspectos muy fundamentales de nuestro comportamiento: cómo me sostengo erguido, cómo sostengo la cabeza, cómo giro para mirar hacia un costado, cómo extiendo el brazo, cómo agarro con la mano, cómo respiro, cómo emito un sonido, cómo muevo los ojos. Las posibilidades son infinitas, y así también la variedad de clases posibles.
En las clases que diseño para músicos exploro con ellos la motricidad particular que, en su caso, debe ser la más perfecta posible: cómo usar la fuerza del tronco para no sobre-exigir las manos, cómo respirar, cómo tranquilizarse, cómo liberar la fuerza expresiva, cómo reducir al mínimo la resistencia interna y las tensiones innecesarias...
En el taller que ofrezco a los miembros del grupo de Facebook “El músico saludable” en noviembre de 2018 exploraremos dos temas centrales: la organización de los hombros y brazos, y la respiración. Son temas que permiten una exploración infinita y cientos de clases distintas, pero este taller intensivo será un buen primer acercamiento. Si quieres mejorar tu rendimiento y acercarte a la posibilidad de hacer música de manera placentera, relajada, sin molestias y sin hacerte daño, este taller sería un paso importante en la dirección correcta.
Elige una de estas dos opciones de día y lugar:
Domingo 18/11/2018, 10:00 – 14:30 en Limache
Domingo 25/11/2018, 10:00 – 14:30, en Santiago (Alonso de Córdoba)
Oferta súper especial extendida hasta el domingo 11 de noviembre de 2018: $27.000 (pesos chilenos).
A partir del lunes 12 de noviembre: $36.000.
La tecnología me permite ofrecer este taller a los colegas más lejanos: por el mismo precio puedes adquirir el acceso a las grabaciones en audio del taller, y hacerlo en tu casa.
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Información y consultas: michael@michael-landau.cl