Si estás viva, respiras. Si no lo piensas nunca en la vida, igual respiras. Si no le prestas atención en ningún momento, respiras. Y si has aprendido mil técnicas de respiración, pranayama, respiración circular, yoga, meditación, viajes chamánicos, o si eres cantante o tocas un instrumento de viento y pasas horas pendiente de tu respiración, igual la mayor parte de tus días respiras de manera automática.
Hace unos pocos años hice un curso de buceo, junto con mi esposa y mis dos hijas, y empezamos a bucear en familia. Ahora, nuestras vacaciones consisten en encontrar un buen lugar para bucear, o volver a uno de nuestros sitios favoritos; de preferencia, con mucha vida marítima y agua calentita. El buceo te obliga a estar muy consciente de la respiración. Primero, porque se escucha muy fuerte; casi todo lo que puedes oír es tu propia respiración. Segundo, manejas tu flotabilidad con el aire. Al inhalar tiendes a subir un poco, y al exhalar te hundes. Así que estás constantemente pendiente de tu respiración; se convierte en parte de tu actividad voluntaria, y claramente sale del modo de piloto automático.
Cuando cantas, sucede lo mismo. Inhalas según la frase que viene, según la vocal que viene; tu acción debe ser consciente y precisa para poder interpretar la música y realizar tu intención musical. El piloto automático no es suficiente para la perfección que requiere la interpretación. Conducir el aire se convierte en un arte preciso y perfecto, momento a momento.
La respiración, idealmente, se ha convertido en una herramienta que manejas bien. Te ayuda a calmar la mente, a tranquilizar los nervios y a centrarte. Y como cualquier actividad repetida, también se traslada con el tiempo hacia el piloto automática. Ya no es necesario prestarle tanta atención, ya sabes cómo hacerlo y cómo funciona, y las cosas salen con facilidad.
El piloto automático es muy necesario, es parte del proceso del aprendizaje. Las acciones repetitivas vuelven habituales y requieren de menos inversión de recursos. Esto te libera para enfocarte en la interpretación, en el repertorio, y no en la técnica.
Sin embargo, cualquier proceso automático necesita una revisión periódica. Es necesario volver a poner atención en los detalles de la técnica, sino se queda estancada y empieza a deteriorar.
Te ofrezco una oportunidad única para hacer esta revisión de la respiración. Nuevas ideas, una mirada fresca, nuevos horizontes: una oportunidad para subir un peldaño y llevar tus conocimientos al próximo nivel.
· Cuídate mejor
· Canta con más soltura y menos tensión
· Libera el cuerpo para respirar plenamente
· Conoce mejor los mecanismo involucrados en la respiración
· Mejora tu percepción de los detalles al respirar
· Usa la respiración para calmarte